Mujeres de la zona centro del estado consultadas por el equipo reporteril de El Tiempo, mostraron dudas ante el uso de un nuevo método anticonceptivo intrauterino presentado por autoridades del Distrito N° 4.
Al menos así se constató en un sondeo realizado entre 15 mujeres de todos los estratos sociales, en el municipio Anaco.
El ama de casa Victoria Ceballos afirmó que le da temor usar el dispositivo para prevenir embarazos, a pesar de admitir que tiene dos meses que no consigue las pastillas.
“He escuchado sobre el nuevo método, pero no tengo la valentía de usarlo porque dicen que duele”, indicó.
Gabriela Pérez manifestó desconfianza en esta opción por considerar que no es infalible. No obstante no supo sustentar su posición y sólo expresó que prefiere más en las pildoras anticonceptivas.
La misma opinión tuvieron las estudiantes Vanessa Díaz y Carolina Bolívar. “Yo no sé que efectos pueda tener eso en mi salud o en la forma de mi cuerp1o”, aseveró Díaz con cierto temor.
Posición
Isolina Sifontes, coordinadora de Desarrollo Social del Distrito N° 4 del Instituto Anzoatiguense de la Salud (Saludanz), destacó que la negativa de algunas mujeres se debe a la falta de conocimiento. Indicó que la asistencia a las actividades informativas es muy poca.
La funcionaria precisó que el factor cultural también es determinante, pues muchas mujeres están acostumbradas a usar la pastilla.
Sin embargo, la escasez de anticonceptivos orales e inyectados cada vez es mayor en las farmacias de la jurisdicción gasífera, por lo que el método intrauterino se ha convertido en el único disponible para la prevención de embarazos en la zona.
Sifontes reafirmó que el porcentaje de mujeres que asisten con el objetivo de utilizar el dispositivo es muy bajo.
Admitió que el desconocimiento genera mucho temor y las féminas sólo acuden al puesto de socorro (ambulatorio) en busca de pastillas anticonceptivas.
“Ahorita sólo utilizamos un método de prevención, ya que la asignación del tratamiento oral ha disminuido”, señaló Sifontes.
Reconoció que a finales del año pasado se presentó una “pequeña falla” en la distribución, pero ahora cada vez llegan menos.
¿A quiénes colocarlo?
Sifontes explicó que las féminas primero deben asistir a una cita donde el especialista determinará si puede o no utilizar el tratamiento.
“Los dispositivos se colocan por cita y la mujer debe venir el segundo día de su período”.
Destacó que a pesar de colocarse de manera gratuita, la demanda es poca.
En cuanto el tiempo de duración, manifestó que depende del cuidado.