Dignora Hernández: El TSJ pasó de intérprete de la Constitución a escudero de la revolución

Dignora Hernández: El TSJ pasó de intérprete de la Constitución a escudero de la revolución

Dignora Hernández

La diputada a la Asamblea Nacional por la Unidad, Dignora Hernández aseveró que el Tribunal Supremo de Justicia continúa haciéndole la tarea al régimen de Nicolás Maduro, “a veces despacito y otras de sopetón, el ritmo lo marca siempre la adrenalina que produce el pánico de Miraflores”.

Nota de prensa





Hernández destacó que el TSJ es el responsable de dar barniz jurídico a las arbitrariedades dictadas por el pavor que reina en Palacio, “de allí pues que su dignidad solo sea comparable con la de los Escuderos del Rey, quien les exige garantizar su subsistencia en el poder a cambio de sus cargos, de nada sirven las credenciales académicas; su único compromiso ha de ser la lealtad, fidelidad, ceguera y sordera social así como cierta dosis de coraje para aguantar el chaparrón, quienes estén dispuestos llevarán sin vergüenza el escudo de la revolución”.

La también dirigente nacional de Cuentas Claras explicó que el TSJ se ha convertido en un intérprete de señas, “ya la Sala Constitucional no le preocupa esclarecer la Constitución, ahora sólo traduce las señas que le hace el coach de Miraflores, con sus acciones vician cada vez más el espíritu de la norma y se colocan por encima de la ley, ya nada les importa”. De la misma manera señaló que “mientras que la tarea del TSJ sea la de proteger a los corruptos que presa de su pánico toman medidas insensatas, desvergonzadas, y peligrosas como las que hasta ahora hemos visto, la Mesa de la Unidad Democrática asumirá el deber ineludible de activar todos los mecanismos legales que propicien un cambio de gobierno en paz, esa es nuestra tarea y no cabe duda que la vamos a cumplir”.

La parlamentaria aprovechó para pronunciarse por los recientes hechos violentos ocurridos en los alrededores del Palacio Federal Legislativo y los grafitis del que fueron objetos las instalaciones del Patrimonio Nacional, “lo que vimos es una muestra clara de lo que ya no pueden hacer las barras del Psuv dentro del hemiciclo de la AN, en virtud que desde el pasado 25 de de febrero, después de observar una conducta inapropiada por parte de éstas, el presidente del Parlamento tomara la decisión de no permitir su presencia, los grafitis y el botellazo que recibió el diputado Carlos Paparoni, son expresión del mensaje descocado que se ha venido gestando desde el gobierno, todo lo cual se realiza bajo el mismo formato y tiene como único mandato: amedrentar a la AN para doblegarla, pero lo que no queda nada claro es el por qué necesitan colocarse las capuchas, escudarse en la clandestinidad, resulta innecesario, absurdo y un tanto cómico, si no fuera tan patético, esconderse cuando todos sabemos quiénes son, quienes lo mandan y porque lo hacen. Vaya estupidez”.

Por último, la legisladora, Dignora Hernández destacó que los hechos que se han dado no son simple expresión de violencia, constituyen un profundo desprecio por la democracia y sus instituciones. “En este momento lo que nos estamos jugando es la democracia, quizá no esté de más recordar en esta ocasión las palabras de Juan Pablo II cuando expresó: La democracia necesita de la virtud, si no quiere ir contra todo lo que pretende defender y estimular, en acciones como esta no hay moralidad, respeto a las instituciones y mucho menos rectitud”.