El caos de Pdvsa en progreso: Misma producción, menos ingresos

El caos de Pdvsa en progreso: Misma producción, menos ingresos

Foto: Rosneft y Pdvsa
Foto: Rosneft y Pdvsa

 

Ayer la agencia Reuters señalaba que PDVSA reducía sus envíos a CITGO en EEUU para aumentar sus entregas a Rusia. Ciertamente PDVSA ha estado enviando crudo a Rusia y Bielorrusia para pagar armamento comprado hace ya unos años (helicópteros, fusiles, tanques, etc.).

Por Horacio Medina @unape





Pero este aumento en la cuota corresponde al inicio del pago 1 mil 15 millones de US$ que  Rosneft realizó en abril a PDVSA como pago anticipado por  un acuerdo de compra de crudo a la compañía. Esto de acuerdo con lo que muestra Rosneft en su informe financiero trimestral.

Como todos sabemos, pero que tenemos que recordar de manera constante, Rusia es un aliado político cercano al régimen venezolano. Tampoco debemos olvidar que otro miembro incluido en la lista de sancionados por los EEUU (lista Clinton), es el presidente ejecutivo de Rosneft, señor Igor Sechin,  que comenzando el año 2017, afirmo en una entrevista que su empresa (así con sentido de propiedad total), la mayor petrolera del mundo que cotiza en bolsa por producción, seguiría trabajando en Venezuela y nunca saldría del país.

Según nuestras consultas con algunos amigos economistas y revisando publicaciones del sector, la deuda con Rusia – Rosneft con PDVSA, oscila entre 4 mil 500 millones y 6 mil millones de US$. Esto además de tener (¿todavía?) el 49.9% de CITGO, como garantía ante un posible default por el prestamos de 1 mil 915 millones de US$, otorgados a PDVSA en octubre para pagar compromisos de interese y capital.

Dejar de enviar crudo a los EEUU, es reducir los ingresos para pagar compromisos de un dinero ya recibido y gastado. Es decir, crece de manera importante el volumen de crudo que se produce y que ocasiona un costo de producción, pero que no registra ingresos, porque ya fue pagado y gastado. Se suma al volumen enviado a China y, por supuesto, al que se envía a Cuba y países del CARICOM.

El alerta que anuncia el caos en progreso.

Petróleos de Venezuela (PDVSA), solicitó hace un par de semanas, a sus tenedores de bonos con vencimiento al 2020, un permiso para retrasar la publicación de sus estados financieros auditados hasta el 11 de agosto. De acuerdo con informaciones de prensa y de algunos analistas del sector financiero internacional, esta “demora” en la “emisión de los estados financieros por parte de los auditores de KPMG”, la firma que por años se ha encargado de estos menesteres.

Dicha solicitud y notificación se envió al banco MUFG Union Bank y los inversores han debido otorgar el permiso para evitar que el retraso en el suministro de la referida información financiera sea considerado un “incumplimiento”.

De acuerdo con lo que ha trascendido, PDVSA ha explicado que el retraso en la presentación de los resultados financieros auditados, se ha debido  a la “complejidad” de sus operaciones y a revisiones adicionales a los informes de años anteriores, que asegura no inciden en sus finanzas. (Traduciendo, esto quiere decir que cada vez se complica más maquillar las cifras, datos y resultados de la empresa, para aparentar una situación estable que, en realidad, se traduce en un inminente colapso operacional y financiero).