Oro viajero, por Domingo Alberto Rangel

Domingo Alberto Rangel @DomingoAlbertoR

 

Si los tomadores de pelo rusos que llamaron recientemente al diputado Guaidó se hubieran presentado como altos ejecutivos del Banco de Inglaterra seguramente habrían conseguido una respuesta semejante a la que grabaron haciéndose pasar por banqueros suecos… pero con una variante.

Por Domingo Alberto Rangel





En ese caso al autoproclamado por motivos prácticos más le convendría pedirle a los tomadores de pelo que si presuntamente le iban a devolver el oro de la Nación que está secuestrado en ese banco inglés… mejor era que le depositaran el monto menos comisiones… en una cuenta suiza… a su nombre.

No es literatura ni mala intención: Sucede que según se evidencia los cercanos colaboradores del diputado Guaidó están más preocupados por el destino del oro secuestrado en Londres y otras pertenecías del estado venezolano en el extranjero… que por las medicinas y alimentos de la ayuda humanitaria.

El interino autoproclamado en este caso espera que los ingleses le entreguen a él, si no los lingotes al menos el equivalente en divisas que serían depositadas en una cuenta suiza a su nombre o el de gente de su confianza.

Abuso de poder diría un purista.

Mientras tanto una vieja canción advertía que “quien vive de ilusiones… Muere de desengaños”. Letra que en este caso se ajusta como el guante a la mano.

Antes que los ingleses hagan este gesto inaudito en su historial de piratas es más probable que primero regresen a Egipto en fila india’, todos los obeliscos que adornan las ciudades europeas y que fueron robados en el período colonial.

¿Quién ha visto pirata devolviendo el botín? !Ni Hollywood se atrevió’ a sugerir tanta bondad!

El Banco de Inglaterra no entregara’ a sus legítimos propietarios ese oro de nuestra patria.

No cometerán semejante gentileza o estupidez, dejo la calificación al gusto de cada lector, ni con el diputado autoproclamado ni tampoco con el presidente Maduro.

En un país más serio y que no esté’ tan desvencijado como lo está el nuestro tras dos décadas de camorra polarizarte… alguien causante del daño que ha causado el ciudadano Guaidó’ –y no vengan a recordarme que los bolivarianos han hecho más daños porque no estoy organizando competencias- tendría que responder ante los tribunales por esta pérdida que nos empobrece a todos.

Sin embargo en nuestra pulpería cultural habrá’ quién defienda la maldad y Guaidó’ puede dormir tranquilo dentro de las solitarias instalaciones de la embajada que lo maneja.

Vistas así’ las cosas es un evidente auto gol el que metió’ en su portería el diputado Guaidó’ pero el gobierno nacional no puede tocar fanfarria porque en su equipo también hay culpables.

Sucede que el oro de marras reposaba tranquilo en el BCV cuando el entonces presidente Chávez ordeno’ a esos lingotes el fatal viaje a Londres y debo suponer que a ese oro le sacaron pasaporte porque antes había pasado el Atlántico pero de regreso a casa.

A cosa rara diría otro purista: Venezuela tiene un oro viajero…

El oro repatriado en aquellos años locos para reposar en el BCV por motivos de seguridad y supuestos consejos de Fidel Castro… Súbitamente viajo’ de nuevo a Londres para ser empeñado en el Banco de Inglaterra a cambio de nueva deuda cuyo monto se gasto’ en regalos que facilitaron otro triunfo electoral.

La deuda se pago’ pero la bobería tuvo malos resultados y en consecuencia todos tienen su cuota de culpa por falta de patriotismo unos… O por populistas los otros.

En conclusión: Salvo que nos quiten algo más valioso… Ese Oro se perdió para siempre.