La inflación devora el bolsillo de los venezolanos

Se ve a personas en la entrada de un supermercado en Caracas el 22 de agosto de 2018.
La confusión continúa en Venezuela por los nuevos billetes que el gobierno ha puesto en circulación en un intento por frenar la hiperinflación. / FOTO AFP / Federico PARRA

 

Supermercados, abastos y mercados municipales registran desabastecimiento de productos lácteos, verduras, hortalizas y frutas.

Por Ana Uzcátegui / laprensalara.com.ve





Es poca la oferta que existe en comercios de Barquisimeto y Palavecino, lo que ha ocasionado que estos rubros alimenticios registren un alza en sus precios a pesar que el dólar lleva dos semanas manteniendo su precio en 21 mil bolívares.

Fernando Camino, expresidente de Fedeagro y coordinador del Plan Agroalimentario de la Asamblea Nacional, asegura que el desabastecimiento se debe a varios indicadores, el principal es que alimentos como la cebolla, papa y tomate, sólo se sembraron 20 mil hectáreas de las 60 mil que hay a nivel nacional. El segundo indicador es la falta de gasolina que siguen registrando estados como Lara, sobre todo en municipios como Jiménez y Andrés Eloy Blanco.

Táchira, Mérida y Trujillo también tienen fallas en el combustible. “Sin gasolina esos productores no pueden transportar la mercancía, los alimentos desaparecen y los pocos disponibles incrementan su precio por la escasa demanda”, mencionó.

Lechosa, uvas, melón, fresa y guayaba casi no se exhiben en los mostradores, la demanda se concentra en el cambur que registra un precio de 6 mil bolívares cuando la semana pasada estaba en 4 mil 500, el plátano en Garzón que tiene un precio de 16 mil bolívares, 3 mil más que el lunes pasado.

El tomate ya está en 34 mil 900, 3 mil bolívares más que hace cinco días y la papa en la mayoría de los comercios ronda los 20 mil bolívares, 2 mil bolívares más que hace unos días.

Productos como la leche, tanto líquida como en polvo, no se consiguen con facilidad. De seis establecimientos recorridos por el equipo de LA PRENSA, en la única parte que la ofertaban era en el mercado Terepaima a un valor de 140 mil bolívares el kilo, cuando hace una semana se ubicaba en el mismo lugar en 120 mil bolívares.

El consumo sigue bajando, el presidente de la Cámara de Comercio en Lara, Pablo Chirinos, informó que en 70% se ubica la pérdida del poder adquisitivo del larense. “Sólo un tercio de la población puede seguir comprando productos de primera necesidad, eso incide de la productividad de las empresas; tres cuartas partes han desaparecido en el país”, asegura.