De manera sorpresiva, la petrolera rusa Rosneft publicó el 28 de marzo en su portal la decisión de vender todos sus intereses y cesar su participación en sus negocios en Venezuela.
Por DMB | Especial lapatilla.com
Indica Rosneft en su nota que se incluían las participaciones en las empresas conjuntas con Pdvsa: En el mejorador de crudos Petromonagas (40%), en los campos petroleros operados por Petroperijá (40%), Boquerón (26,6%), Petromiranda (32%) y Petrovictoria (40%), empresas dedicadas tanto a la producción petrolera como a los servicios de campo, y operaciones comerciales. Igualmente es propietaria de la Empresa Precision Drilling y participa con Pdvsa en la Empresa de Capital Mixto Perforosven
Si bien no lo hacen explícito en su nota, en el último trimestre de 2018 el régimen de Maduro le otorgó la licencia para la explotación del 100 por ciento de dos campos gasíferos, Mejillones y Patao. También Pdvsa le entregó en garantía a Rosneft el 49,9 por ciento de Citgo Petroleum a cambio de un préstamo por 1.500 millones de dólares en noviembre de 2016. En marzo de este año, La Asamblea Nacional anuló el acuerdo que cedió el 49,9 por ciento de las acciones de Citgo Holding a Rosneft Trading.
La operación de venta
Desde el año 2006 Rosneft es un empresa pública que se cotiza en las bolsas de Moscú y Londres. Hasta el momento de la venta de los activos en Venezuela, el estado ruso mantenía una participación del 50,1% del capital accionario con la empresa Rosneftegaz, seguido por la filial de la petrolera inglesa BP Rusia y por el fondo soberano de Catar, (QIA), a través de QH Oil Investments. El restante 11,22% del capital está distribuído en miles de accionistas minoritarios.
Luego de las sanciones de EEUU a las filiales Rosneft Trading y TNK Trading por sus operaciones con Pdvsa, el directorio de Rosneft holding, presidido por el excanciller alemán Gerhard Schroeder, decidió desconsolidar sus intereses en Venezuela, y el gobierno ruso, a través de la accionista Rosneftegaz ofreció pagar por ellos con el equivalente a un 9,6% de acciones de Rosneft Holding. Con este pago, la estatal rusa cede la mayoría del 50,1% que mantenía en la estructura accionaria de Rosneft Holding.
Reporta el diario de negocios ruso Vedomosti, citando a la agencia Intefax, que el 27 de marzo, el 9,6% de las acciones en Rosneft se habían estimado en 308 mil millones de rublos (aproximadamente 4 mil millones de dólares) que arrojaría en precio por acción transada de 317 rublos, un valor “generoso” porque la acción de Rosneft se negoció el viernes a 302,8 rublos según indica Interfax.
Aparece Roszarubezhneft JSC
Vedomosti informa que la La Agencia Federal de Gestión de la Propiedad rusa registró en Moscú el 28 de marzo -el mismo día del anuncio de venta de sus intereses en Venezuela de Rosneft- la empresa Roszarubezhneft JSC con un gigantesco capital de 322,7 millones de rublos, (4,19 mil millones de dólares) citando los datos de SPARK-Interfax. Qué tipo de empresa y sus objetivos no fueron revelados.
El director general de la nueva compañía es Nikolai A. Rybchuk. Hasta ahora, no había ninguna mención de él en el sistema analítico “SPARK-Interfax”, escribe “Interfax” en su nota citada por Vedomosti
Agrega que Rybchuk, es miembro del Consejo de Veteranos de Angola, donde estuvo como agregado militar y representante del Servicio Federal de Transporte de Alta Tecnología de Rusia en este estado africano. En Angola, indica interfax, que trabajó como traductor militar del actual presidente ejecutivo de Rosneft, Igor Sechin.
Por ahora son papeles sobre el escritorio de Putin
Un experto petrolero jubilado de Pdvsa, consultado por lapatilla.com, opinó que la venta de Rosneft los activos de Venezuela es una jugada sensata para una empresa comercial “Con ello salen del riego geopolítico que el gobierno de Putin había llevado a las actividades empresariales, inaceptable para los otros accionistas de la empresa”
Consultado sobre cuáles planes podría tener Putin sobre esos activos nos dijo que “por el momento, por varios largos meses, se quedarán como papeles sobre el escritorio de Vladimir Putin. Con una recesión mundial que ha llevados los precios del crudo al piso, es muy difícil, sino imposible, que alguna otra empresa rusa, cien por ciento de propiedad estatal, tenga capacidad técnica y financiera para hacerse cargo de esas operaciones en el país de manera rentable.
“Y todavía quedan muchas manchas negras en esa operación de venta, que tenía necesariamente ser aprobada por el Ministerio de Petróleo de Venezuela y por la legítima Asamblea Nacional” agregó. “Quizás, mientras tanto, sea Pdvsa por esfuerzo propio, la que se ocupe que esos activos, pero no sé de qué manera” concluyó (lapatilla.com)