Jerusalén cierra 17 barrios y asentamientos afectados por el coronavirus

Jerusalén cierra 17 barrios y asentamientos afectados por el coronavirus

Un hombre judío ultraortodoxo usa una máscara facial en medio de restricciones de la enfermedad por coronavirus (COVID-19) en una calle del barrio judío ortodoxo en Jerusalén 27 de marzo de 2020 REUTERS / Ronen Zvulun

 

 

La lucha contra la expansión del coronavirus continúa en Israel, en esta ocasión con la obligatoriedad de llevar mascarilla en espacios públicos y el cierre forzoso de los 17 barrios y asentamientos de Jerusalén más afectados por la COVID-19, la mayoría de ellos ultraortodoxos.





El Gobierno ha declarado “áreas restringidas” barrios como los céntricos de Mea Shearim o Givat Shaoul, o los asentamientos israelíes en territorio palestino ocupado de Neve Yaakov o Ramat Shlomo, además de prolongar la restricción de movimiento entre ciudades hasta el próximo miércoles.

Los residentes de estas zonas solo podrán salir de ellas para trabajar, recibir atención médica “esencial”, participar en el funeral de un familiar de primer grado, entregar a menores a su progenitor, en el caso de divorciados, hacer gestiones legales o cualquier motivo de emergencia o esencial que haya recibido aprobación previa.

Patrullas de la Policía cerraron hoy a mediodía los accesos a esas zonas, con vallas y barreras de plástico, y más de un millar de agentes, junto a 200 soldados y el apoyo de drones para vigilar desde el aire velaban por el cumplimiento de la normativa.

Además, hoy a las siete de la mañana (4.00 GMT) también entró en vigor en Israel la obligatoriedad de llevar puestas mascarillas en el espacio público, a excepción de los menores de seis años, discapacitados, cuando se esté solo o con un familiar dentro de un vehículo o en el trabajo siempre que haya una distancia de al menos dos metros entre los empleados.

Desde que se inició la emergencia han muerto en Israel 103 personas por coronavirus y cerca de 10.800 han sido confirmadas positivo, de las que 174 están en situación grave, 123 de ellas con respiradores.

Al igual que en España, Italia y otros países, la población más afectada ha sido la mayor, especialmente aquellos que se encontraban en residencias y hogares de ancianos, que representan un tercio de las víctimas mortales en el país.

EFE