Es hora de desempolvar esas botas y ajustar esos esquís. Al menos un centro turístico en las Montañas Rocosas de Colorado planea reabrir después de una pausa de más de dos meses causada por el coronavirus.
Arapahoe Basin abrirá el miércoles con restricciones, ofreciendo una señal de esperanza para una industria devastada y para las comunidades de montaña que se vieron desproporcionadamente afectadas por la enfermedad al comienzo de la pandemia.
El complejo cerca de la División Continental al oeste de Denver limitará la cantidad de esquiadores y practicantes de snowboard al requerir reservaciones, y los huéspedes deben cubrirse la cara si no pueden mantener el distanciamiento social.
La “playa” de A-Basin, la hilera de estacionamientos más cercana a los ascensores, no organizará ninguna fiesta esta primavera, y en todos los estacionamientos se prohíbe el uso de vehículos de cola.
“Esto va a ser muy diferente”, escribió Alan Henceroth, director de operaciones del resort, en su blog el domingo.
La reapertura de A-Basin se produce después de la aprobación de la solicitud del Condado de Summit de una variación de la orden de salud pública estatal que cerró los centros turísticos el 14 de marzo. Se espera que el gobernador Jared Polis haga un anuncio que involucre a todas las estaciones de esquí de Colorado el lunes.
Pero la capa de nieve que se derrite rápidamente en el país alto significa que la mayoría no podrá reabrir. Hasta ahora, solo A-Basin, que alcanza una altura de 13.050 pies sobre el nivel del mar, está planeando encender sus elevadores.
El complejo generalmente permanece abierto hasta principios de junio y, a veces, hasta principios de julio, dependiendo de la capa de nieve.
Melanie Mills, presidenta y directora ejecutiva de Colorado Ski Country USA, un grupo de la industria que representa 23 áreas de esquí en todo el estado, dijo que la reapertura haría poco para ayudar a las estaciones económicamente maltratadas, pero sería “una verdadera oportunidad de confianza para avanzar”.
“Sería un gran estímulo moral después de esta experiencia”, dijo poco después de que los centros turísticos se vieron obligados a cerrar.
Aún así, algunos optan por no permitir el esquí de primavera tardía.
La estación de esquí de Breckenridge jugó con la idea de reabrir, pero el propietario, Vail Resorts, anunció el jueves que se centraría en comenzar sus operaciones de verano a fines de junio o principios de julio.
“Nuestro objetivo no es ganar la carrera para reabrir, es mirar hacia atrás un día con gran orgullo en nuestro historial de seguridad”, escribió el CEO de Vail Resorts, Rob Katz, en una carta a los empleados.
Agregó que el “tremendo entusiasmo” de participar en algunas carreras más esta temporada, por tentador que sea, podría ser un desafío para el resort.
A-Basin se une a Timberline Lodge y Ski Area de Oregón y al monte. Licenciado en reapertura. Los centros turísticos de Oregón se abrieron a mediados de mayo después de que la gobernadora Kate Brown firmó una orden ejecutiva que permite que el esquí y el snowboard se reanuden en todo el estado.
“Creemos que la recreación al aire libre, ya sea esquiar, hacer snowboard o no, es buena física y psicológicamente para las personas”, dijo el portavoz de Timberline, John Burton. “Esto es algo que la gente necesita para avanzar y ser seres humanos felices y saludables”.
El complejo abrió con un nuevo sistema de reservas y requiere que los huéspedes respondan un cuestionario COVID-19 y usen anteojos o gafas, así como máscaras y guantes. También deben mantenerse alejados de cualquier persona que no esté en su grupo
Burton dijo que la transición “ha ido muy bien” y ofrece la oportunidad de enseñar a otros resorts cómo operar si el coronavirus afecta la próxima temporada de invierno.
“Es una buena experiencia, pero la gente necesita estar preparada para algo muy, muy diferente”, dijo Burton. “Es un mundo nuevo”.