La anticipación estaba allí antes del fin de semana. Los hoteles y las playas se reabrieron el lunes, trayendo de vuelta a los visitantes a Ocean Drive. Pero un toque de queda entró en vigencia, evitando que esos planes se materialicen.
“La gente se ha quedado en sus casas. Tenían miedo de salir ”, dijo Jorge Marroon, un servidor en el Café Milano que ha estado abierto desde la semana pasada. “En los últimos dos días ha habido menos gente que la semana pasada”.
Era uno de los muchos trabajadores ansiosos listos para ver las playas y los hoteles abiertos, ya que más personas aquí podrían significar más dinero para ellos.
Daisy Vetreyes trabaja en News Cafe.
“Seguro que las empresas estaban acostumbradas a tenerlo lleno de clientes, pero ahora no hay nadie en ningún lado”, dijo.
Las empresas no son las únicas decepcionadas. La gente también está molesta. Aquellos que viven aquí y aquellos que pueden haber planeado venir aquí pero ahora se están quedando en casa.
Es un desafío que la Oficina de Convenciones y Visitantes del Gran Miami ha estado tratando de superar.
La campaña #MiamiShines es algo que la oficina ha comenzado. Quieren que la gente se entusiasme con las vacaciones en Miami.
Quieren reabrir, pero lo hacen de manera segura. Eso es algo por lo que Mitch Novak, del Hotel Sherbrooke, está preocupado.
“He decidido no volver a abrir y evaluaré la situación hacia fin de mes”, dijo.
Es una decisión que tomó hace un tiempo mientras controlaba el coronavirus. Ha mantenido a su personal que, como todos los demás, está listo para recibir a los clientes.
“¡Cuando se vuelvan a abrir las playas, espero que todos vengan al Café Milano!” dijo Marroon.
El toque de queda entró en vigencia el pasado fin de semana y permanece vigente esta semana. Todas las playas del condado de Miami-Dade permanecen cerradas mientras dure el pedido.