Soy homosexual, pero eso no me caracteriza: Portera del Atlético de Madrid, Peyraud-Magnin, se confiesa

Soy homosexual, pero eso no me caracteriza: Portera del Atlético de Madrid, Peyraud-Magnin, se confiesa

Peyraud-Magnin

 

 

“Soy homosexual, pero eso no me caracteriza”. La arquera Pauline Peyraud-Magnin fue la primera futbolista internacional francesa en activo en hacer pública su condición sexual, en agosto, y está “agradablemente sorprendida” por las “reacciones positivas”, añadiendo que la sociedad “debe superar un punto de inflexión”.





La portera de las Bleues y del Atlético de Madrid y su pareja Camille, reciben a la AFP en la intimidad de su casa en las afueras de Madrid, entre sus gatos, sus perros y una bufanda rojiblanca del ‘Atleti’.

En agosto de 2020, Pauline Peyraud-Magnin, de 28 años, publica una foto suya con la que es su pareja desde hace más de un año y le llueven las felicitaciones mediáticas: es la primera internacional francesa (12 convocatorias) en hacer pública su homosexualidad al gran público.

“Estábamos en Madrid…”, avanza Pauline. “Nos veíamos muy guapas”, completa Camille con una carcajada.

“La subí así (la foto), fue bastante repentino. No nos dijimos: ‘vamos a hacer esto para tener esas reacciones’. Nunca fue el objetivo. Leímos los mensajes juntas. Hubo muchos. Mensajes bonitos, otros duros también”, dijo.

“No negativos, pero duros de leer. Especialmente el de una chica de Sudamérica que decía que era complicado vivir su homosexualidad allí. En ese momento, nos dijimos que teníamos suerte, y que hay que aprovecharla”, añadió la portera del Atlético, que se pondrá los guantes el domingo para desafiar al Real Madrid en el derbi madrileño de la liga femenina.

 

– “¡De locos!” –

 

“Para mí era normal subir una foto a mi cuenta. No imaginaba el impacto que tendría”, asegura.

Les reacciones positivas inundan las redes sociales y los medios. La portera asistió a este movimiento mientras viajaba con la selección francesa a Macedonia (11-0) el 23 de octubre para unos clasificatorios para la Eurocopa.

Todas estas reacciones “asombraron” a Camille, su pareja. “Estamos en el siglo XXI… Que me feliciten por publicar una foto normal con mi compañera… Es bonito, pero me sorprende. En otros países hay muchas futbolistas homosexuales y todo va muy bien…”, relata.

¿Todos estos mensajes pesan sobre el día a día de estas dos mujeres?

“Para mí, lo que estamos haciendo (esta entrevista) es de locos. No entiendo que hablemos tanto de este tema, que incluso se haga un reportaje… ¡Es de locos! No me doy cuenta. Para mí es normal, de hecho”, dice ‘PPM’.

“No esperaba nada, pero me sorprendió agradablemente que haya tantas reacciones. Pensé que es un tema que merece ser abierto. Creo que hoy tenemos que superar un punto de inflexión. Es necesario”, afirma la arquera.

 

– ‘¿Por qué esconderse?’ –

 

“¿Por qué justificarse o esconderse?”, se pregunta la jugadora, formada en el Lyon. “Vivir y dejar vivir. Soy homosexual, pero eso no me caracteriza. Como un color de piel o una religión”, insiste, en referencia a un tema que le importa mucho.

El hecho de que este anuncio tuviera lugar en el extranjero tal vez no sea anodino para estas dos francesas.

“En Francia, hay tal vez lugares u horas que evitamos. En España, la primera vez que vinimos, fuimos a una calle muy concurrida. Nos sentamos en una terraza… Había muchos homosexuales, hombres, mujeres… y no molestaba a nadie. Nos sorprendimos, nos dijimos: ‘¿Pero, dónde estamos?'” (risas).

Tras haber viajado mucho entre Lyon, Saint-Etienne y Marsella en Francia, el Arsenal y el Atlético en el extranjero, Pauline Peyraud-Magnin se vio “agradablemente sorprendida por las reacciones positivas en el fútbol”.

¿Su acto pionero en Francia podría a partir de ahora abrir la puerta a otras mujeres, otras futbolistas o deportistas?

“Eso espero. Pero no obligo a nadie, sé que puede ser complicado. Es muy personal, de cada uno. Yo, lo he dicho, ya está. Y si es me es más fácil decir las cosas es también porque creo que he encontrado a la persona  correcta”, subraya Pauline, mirando a Camille.