Los dueños de Plus Ultra disolvieron una sociedad en Panamá cinco días antes del rescate

Los dueños de Plus Ultra disolvieron una sociedad en Panamá cinco días antes del rescate

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Los principales accionistas de Plus Ultra -los empresarios venezolanos Rodolfo Reyes Rojas y Raif El Arigie Harbie- disolvieron una sociedad en Panamá, supuestamente ‘pantalla’, cinco días antes del rescate de la aerolínea por parte del Gobierno español con 53 millones de euros.





Por: Vozpopuli

En concreto, la sociedad, llamada SNIP Aéreo, arrancó sus operaciones en enero 2017, el mismo año en el que los empresarios venezolanos entraron en Plus Ultra. La disolución se ordenó el 4 de marzo de 2021 y cinco días después, el 9 de marzo, la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) acordó conceder la ayuda a la aerolínea Plus Ultra, según se desprende de documentación obtenida por el grupo europeo de Ciudadanos a través del Registro Mercantil de Panamá.

De acuerdo a la documentación que ha podido cotejar este medio, los “dignatarios” Ibrahin Ibrahin Ibrahin, Raif El Arigie Harbie y Rodolfo José Reyes Rojas firmaron una orden de disolución de SNIP Aéreo “por haber cumplido con los objetivos específicos por la cual fue constituida”.

Curiosamente, Rodolfo Reyes Rojas, Roberto Roselli y Raif El Arigie Harbie controlan el 56,8% de Plus Ultra a través de una sociedad denominada Snip Aviation, dedicada a la “tenencia de participación en el capital de otras entidades”. Un nombre similar al de la sociedad panameña que administran los mismos empresarios.

Paralelamente, conviene recordar que el magnate tras Plus Ultra cercano al régimen venezolano, Camilo Ibrahim Issa, fue recibido en la embajada de España en Caracas un día después de la disolución de SNIP Aéreo y cuatro días antes del rescate, como avanzó Vozpópuli.

Luis Garicano, eurodiputado de Ciudadanos que ha denunciado el rescate ante la Comisión Europea, apunta en su escrito de alegaciones que si bien se desconoce la conexión con Snip Aviation, podría tratarse de “un holding pantalla”, pues tiene una denominación “muy similar” y “el nombre mal escrito es una táctica típica de blanqueo de capitales”.

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