La trágica historia de la madre mexicana de Marilyn Monroe

La trágica historia de la madre mexicana de Marilyn Monroe

El 13 de junio de 1926, Gladys Baker, de 26 años, llevó a su hija Norma Jeane Mortenson, de dos semanas, a la casa de acogida de Ida y Wayne Bolender en Hawthorne, California | Foto: swashvillage.org

 

Para los que no conozcan a Gladys Pearl Baker, quien fue la madre de Norma Jeane Mortenson (nombre real de Marilyn Monroe), les revelamos que era originaria de Piedras Negras, Coahuila, y nació el 27 de mayo de 1902. De acuerdo con los biógrafos oficiales de la actriz conocida como la bomba sexy, su vida estuvo llena de sufrimiento y dolor a causa de que Gladys fue diagnosticada con esquizofrenia paranoica.

Por Glamour





Por lo que sabemos, Marilyn tuvo una muy dura infancia, llena de carencias (afectivas y económicas), ya que estuvo alejada de su madre y tuvo que ser puesta en adopción en hogares temporales. Desafortunadamente los tormentos mentales de Gladys afectaron profundamente a su hija, quien siempre se culpó por haber nacido.

Gladys Pearl Baker nació en Piedras Negras. Coahuiila. Foto: Wikipedia.

 

La madre de la actriz tuvo un historial amoroso bastante complicado, primero estuvo casada con Jack Baker, quien la abandonado llevándose a sus dos hijos, mientras que su segundo esposo, Martin Edward Mortenson, desapareció después de unos meses de matrimonio y sin saber que era padre de Marilyn. Gladys Pearl Baker, que en aquel entonces trabajaba como cortadora de negativos de películas en Consolidated Film Industries, decidió dejar a Norma Jeane al cuidado de una familia religiosa, ya que no se sentía con la capacidad de hacerse cargo de ella.

El triste final de la relación de Marilyn Monroe y su madre

A pesar de que la relación de madre e hija comenzara con el pie izquierdo, Gladys Pearl Baker fue pieza clave en la vida de su hija y podría decirse que la ayudó a encontrar su destino, ya que durante su adolescencia ambas vivieron juntas cerca de Hollywood Boulevard, lugar que inspiró a la actriz a soñar muy alto: “Podía pasar sola todo el día y parte de la noche en primera fila mirando la pantalla gigante. Me encantaba”, relató Monroe.

Dueña de una belleza impactante, la actriz tuvo un trágico final cuando apenas tenía 36 años. (Netflix)

 

Pero a pesar de que vivir con su madre era un sueño que tenía, la joven tuvo una complicada vida llena de fiestas desenfrenadas y alcohol. Desafortunadamente tanto para madre e hija el sueño terminó cuando un día Marilyn regresó a casa y su madre no estaba ya que había sido internada en hospital psiquiátrico, lugar en el que permaneció hasta su muerte en 1984.

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