“Nos tratan como animales”: empleados de empresa que empaqueta bolsas Clap para todo el país exigen pago de liquidación

“Nos tratan como animales”: empleados de empresa que empaqueta bolsas Clap para todo el país exigen pago de liquidación

 

Los trabajadores de la empresa Oceanus Group C.A., la cual se dedica al empaque y distribución de las bolsas Clap a todo el país, se concentraron en la Inspectoría del Trabajo para exigir que les paguen lo que les adeudan a unos trabajadores que fueron despedidos sin motivos, pese a que tenían contrato indefinido.





Por Corresponsalía lapatilla.com

Los empleados denunciaron que no es la primera vez que esto sucede. También están cansados de los constantes atropellos y abusos por parte de la empresa, por lo que la mayoría no quiere reenganche, sino que les paguen su liquidación como debe ser.

En representación de los trabajadores, Francis Clara, detalló que no tienen las condiciones mínimas para trabajar, no reciben guantes ni botas de seguridad que son necesarias para este trabajo. Tampoco les respetan sus beneficios que por ley les corresponde.

En la empresa laboran unas 700 personas que cumplen horarios de hasta 17 horas, ya que la compañía labora las 24 horas del día para poder despachar al menos 48.000 bolsas Clap diarias que salen del galpón ubicado en la Zona Franca de Punto Fijo, estado Falcón.

 

 

“Como formamos un sindicato, me sacaron del área laboral. Luego de tantas discusiones nos pusieron un comedor, pero nos ubicaron al lado del almacén de combustible y por donde pasa una alcantarilla de aguas negras. Los baños nunca tienen agua, lo que dificulta que los empleados puedan hacer sus necesidades sin estar en riesgo de enfermarse. También es un problema para que pongan el agua necesaria para las siete líneas de producción. Nos tratan como animales”.

Refirieron que les desmejoraron el salario con el aumento que anunció el régimen de Nicolás Maduro en mayo de este año. “No hubo ningún aumento, nos quitaron un bono de producción para que el sueldo nos diera lo mismo con el aumento. No hay ningún beneficio, y ni porque trabajamos los días feriados, nos pagan eso”, dijo.

 

 

Tampoco tienen transporte nocturno, pese a que hay líneas de producción que trabajan 18 horas, y en muchas oportunidades les ha tocado salir a pie del lugar para llegar a sus hogares a altas horas de la noche. “Si llegamos tarde nos descuentan un día de trabajo, y si faltamos un día, nos descuentan tres días.
Tampoco nos respetan los justificativos médicos, pues igual nos descuentan la plata. Ya estamos cansados de tantos atropellos”.

También denunciaron que les ha tocado descansar sobre sacos y cajas, porque no tienen un espacio para ello, y cuando llega comida contaminada, los hacen embolsarlas igualmente.

“No hay respeto por el ser humano. La comida se embolsa igual así esté contaminada con cocos. El que denuncia algo, lo amenazan con botarlo. Somos padres y madres de familia que trabajamos en el lugar para llevar el sustento diario a nuestras casas, pero esta empresa se ha pasado con todo lo que nos hacen pasar”, dijo.