En pleno siglo XXI, habitantes del sector El Kilombo de la parroquia Caicara, municipio Cedeño, ubicado al noroeste de Monagas, deben abastecerse con agua de lluvia, debido a la carencia del recurso hídrico que afecta a los ciudadanos en los 16 años que tiene fundado el lugar.
Por: Corresponsalía
Tanto en las anteriores gestiones chavistas como en la actual, los residentes manifiestan que nunca han sido tomados en cuenta para brindarles una mejor calidad de vida en materia de servicios públicos. Para abastecerse de agua, los vecinos deben bajar hacia una toma y luego subir con los pesados botellones.
“En este sector vivimos unas 30 familias que padecemos por la falta de agua, y los niños son los más afectados en su crecimiento. Pareciera que fuéramos camello, que no existiéramos, porque no nos toman en cuenta. En los 16 años que tiene este sector de fundado, nadie nos ha visitado. Con el alcalde actual he hablado tres veces y le he dicho que tenemos mucha necesidad de agua y hasta ahora no hemos recibido respuesta alguna”, expresó Miriannys Aguilera, vecina afectada.
En la pasada gestión chavista de la exgobernadora Yelitze Santaella, a pesar de plantearle los problemas existentes del sector, nunca han sido tomados en cuenta. Además de la falta de agua, se suman los constantes cortes de electricidad que se registran diariamente, la falta de alumbrado, asfalto y casas en deplorables condiciones.
“Aquí todos los días se va la luz. Ningún vecino puede tener una hornilla eléctrica, aire acondicionado, incluso, un ventilador trabaja forzado por el servicio tan deficiente de electricidad. Cuando llueve, ponemos a llenar los tanques y pipotes para, por lo menos, tener agua para echarle a la poceta, limpiar el baño, lavar la ropa y hasta para bañarse. ¿Cómo es posible que tengamos que vivir en tan precarias condiciones?”, se preguntó Aguilera.
Criticó que se gaste dinero en fiestas, mientras muchas zonas están padeciendo por los deficientes servicios públicos.
