Una operación internacional contra el tráfico de armas, en la que participaron la Guardia Civil española, la Agencia Nacional contra el Crimen (NCA) de Reino Unido, Europol y policías de otros ocho países, dio como resultado la incautación de 760 armas y 80 personas detenidas.
Según informó este domingo la Guardia Civil, la investigación conjunta comenzó hace tres años cuando agentes de este cuerpo de segurdad y de la NCA detectaron a numerosos delincuentes que se surtían de armas ilegales en el mercado europeo, incluido el español.
Como resultado, se detuvo a personas vinculadas a grupos extremistas, organizaciones criminales o bandas juveniles con numerosos antecedentes policiales.
Adquirían las armas a través de internet en establecimientos y plataformas ‘online’ autorizada y comúnmente eran armas conocidas como detonadoras o de fogueo, que transformaban en armas con capacidad de efectuar fuego real y disparar munición con proyectil.
Estas armas eran obtenidas por personas de diferentes países de la Unión Europea, en su mayoría británicos, que utilizaban identidades ficticias, direcciones falsas o medios virtuales de pago clonados.
Según la Guardia Civil, este tipo de armas son especialmente preocupantes en países como Reino Unido, donde más del 40 % de las que están implicadas en hechos delictivos originalmente no son letales, pero son modificadas y empleadas en hechos violentos, como los 445 tiroteos con 23 víctimas mortales registrados en ese país el año pasado.
Tras detectar esta práctica, la Guardia Civil realizó en estos años un seguimiento y análisis de casi 2.000 ventas de armas a extranjeros, cuyos resultados comunicó a Europol y a las policías de los países donde residían los compradores ilegales.
Durante este tiempo se realizaron 150 entregas y registros en Reino Unido, Holanda, Portugal, Suecia, Italia, Suiza, Grecia, Bélgica y Rumanía, que permitieron incautar más de 760 armas de fuego y, además, detener a 80 personas.
Muchas de las armas estaban ya en poder de delincuentes peligrosos, vinculados al crimen organizado, tráfico de drogas, robos con violencia, bandas juveniles, grupos de extrema derecha o agresores sexuales.
De las armas intervenidas, 703 corresponden al trabajo coordinado de la Guardia Civil con la NCA británica, que se saldó con 74 detenidos en el Reino Unido.
Con la información facilitada por la Guardia Civil, la Policía neerlandesa detuvo en julio de 2021 en Rotterdam al gerente de un establecimiento de esa ciudad, que había adquirido un total de 23 armas en España, y en Suecia fue arrestada en marzo de 2020 una persona con antecedentes por tráfico de drogas, que había adquirido varias armas de fuego en España.
EFE