Soy Liberal. Una aproximación al desempeño ciudadano en los tiempos por venir, por Abraham Sequeda

Soy Liberal. Una aproximación al desempeño ciudadano en los tiempos por venir, por Abraham Sequeda

El libre albedrío, que se refiere a la potestad o deseo de hacer algo, poder elegir entre una cosa y otra, se encuentra dentro de la más fundamental de las cualidades con las que se supone dotó un creador al hombre. 

Si de datos bibliográficos históricos se trata, esta afirmación está regada en las santas escrituras. Por ejemplo en PROVERBIOS 3:31, se indica que “No envidies a los violentos, ni optes por andar sus caminos”; también en PROVERBIOS 1:29,  “Por cuanto aborrecieron el conocimiento y no quisieron temer al señor”, y más ampliamente con DEUTERONOMIO 30:19,  “Que los cielos y la tierra escuchen y recuerden, lo que acabo de decir, te puse delante de la vida o la muerte, la bendición o la maldición, escoge pues la vida para que vivas tú y tu descendencia”. 

Tanto la moral como la religión, tienen consecuencias en el terreno político; vivir en sociedad y la salvación del alma. La frase retórica “vivir en libertad”, nos presenta una incongruencia, pues no se puede vivir de otra forma. El que es libre vive y deja vivir, se establece un sistema coordinado que diluye la agonía de vigilar y ser vigilado, para cumplir de forma obligada un comportamiento ético. 





Inmenso misterio que condujo Inicialmente a la curiosidad de muchos al cómo y al por qué de las cosas, para encontrar soluciones y poder tener una existencia. Así ha transcurrido el mundo; dentro de su polisemia, el ser liberal tiene como componente a la libertad. Tenemos libertad de actuar de acuerdo a nuestra naturaleza. El liberal no es oprobioso, es guía para los que no han transitado el camino, de aprender a vivir bien. El liberal desarrolla toda su individualidad de manera conveniente, responsable, constructiva y provechosa. 

Actuamos en la naturaleza dentro de un sistema universal, para tomar decisiones y ejecutarlas. El liberal está motivado al logro y es afecto al manejo coherente de los derechos naturales: la vida, la propiedad, la libertad política y la económica; para alcanzar y promover en lo individual, el desarrollo del bienestar material y cultural.

Donde está el espíritu del bien hay libertad. Ser Liberal es la decisión de formar parte de un sistema organizado. Soy liberal, porque soy parte del bien común, mi cuerpo se desplaza y trasciende en un espacio tiempo, donde el presente no es un instante, sino un largo espacio de vida. 

Ser liberal es poseer la sabiduría política de enfocarse en lo bueno, en el orden, en lo sensato y lo trascendental. La hazaña política del liberal es la valoración y la construcción de la vida y la propiedad, el derecho de gozar y disponer libremente de sus bienes y del fruto de su talento, empresa, estudio, esfuerzo y trabajo.

@abrahamsequeda