Fuerzas de Israel temen que Irán, Hamás y Hezbolá usarán el Ramadán para desestabilizar

Fuerzas de Israel temen que Irán, Hamás y Hezbolá usarán el Ramadán para desestabilizar

Yoav Gallant (Europa Press)

 

El ministro israelí de Defensa, Yoav Gallant, estimó este martes que Irán, el mayor enemigo de Israel, así como el grupo islamista Hamás y la milicia chií libanesa Hezbolá, utilizarán el mes sagrado musulmán del Ramadán para generar violencia en Cisjordania y Jerusalén Este ocupados.

“El principal objetivo de Hamás es tomar el Ramadán y convertirlo en la segunda fase del plan que comenzó el 7 de octubre, con énfasis en el Monte del Templo y Jerusalén”, dijo Gallant en el Comando Central del Ejército israelí, en declaraciones difundidas por la prensa local.





Los israelíes llaman Monte del Templo a lo que los palestinos consideran la Explanada de las Mezquitas, donde se sitúa la mezquita de Al Aqsa, en la Ciudad Vieja de Jerusalén Este ocupado. Se trata del lugar más sagrado para el judaísmo y del tercer lugar más sagrado para los musulmanes, y es el sitio más emblemático del conflicto palestino-israelí.

La semana pasada, Hamás instó a los palestinos de Jerusalén Este y de Cisjordania a revelarse ante cualquier “medida criminal” que prohíba la entrada en la mezquita de Al Aqsa.

“El principal objetivo de Hamás está siendo amplificado por Irán y Hezbolá”, aseguró Gallant.

Israel y Hamás -que controla la Franja de Gaza- se encuentran enzarzados en una guerra desde el 7 de octubre, cuando el grupo islamista perpetró un ataque que incluyó el lanzamiento de cohetes y la infiltración simultánea de miles de sus milicianos que masacraron a unas 1.200 personas en territorio israelí y secuestraron a otras 250.

Un día después de ese ataque, Hezbolá, en solidaridad con Hamás, abrió fuego contra el norte de Israel, cuyo Ejército ha respondido con fuego, desatando el mayor pico de tensión desde 2006 que ha dejado más de 300 muertos, la mayoría en las filas del grupo chií.

Además, Cisjordania e Israel viven su mayor espiral de violencia desde la Segunda Intifada (2000-05), un fenómeno que se agudizó con la guerra en Gaza.

“No debemos darle a Hamás lo que no ha podido lograr desde el comienzo de la guerra”, dijo Gallant, al advertir contra “declaraciones irresponsables” que podrían resultar en una escalada.

El ministro de Seguridad Nacional, el extremista antiárabe Itamar Ben Gvir, instó a impedir la entrada de los palestinos musulmanes a la Explanada de las Mezquitas durante el mes sagrado del Ramadán, que comienza el 10 de marzo.

Estados unidos, Catar y Egipto, que funcionan como mediadores entre Israel y Hamás, buscan un acuerdo de tregua en la Franja de Gaza, donde la guerra ha dejado casi 30.000 muertos, para antes del inicio del Ramadán, aunque hasta el momento no hay señales claras de que se concrete.

Israel se hizo con el control de Cisjordania y Jerusalén Este en la Guerra de los Seis Días de 1967 y, desde entonces, mantiene un régimen de ocupación militar y colonización sobre este territorio.

Con información de EFE